top of page
Foto del escritormonasteriodelasant6

SANTO APÓSTOL BARTOLOMÉ

conmemorado el 11 de junio.


El Santo Apóstol Bartolomé nació en Caná de Galilea y fue uno de los Doce Apóstoles de Cristo. Después de la venida del Espíritu Santo en el día de Pentecostés, se encomendó a los Santos Apóstoles Bartolomé y Felipe (14 de noviembre) predicar el Evangelio en Siria y Asia Menor. En su predicación peregrinaron al través de no pocas ciudades y luego se encontraron nuevamente. Acompañando al Santo Apóstol Felipe estaba su hermana, la Santa Virgen Mariana (gr. Μαριάμη' “Mariame”, o bien, “Mariamne”).

Atravesando las ciudades de Siria y Mizia, padecieron muchas penurias y tribulaciones, fueron lapidados y aprehendidos. En una de las aldeas se encontraron con el Santo Apóstol Juan el Teólogo y juntos partieron hacia Frigia. En la ciudad de Hierópolis, con el poder de sus oraciones sometieron una enorme víbora, a la que los paganos adoraban cual dios. Los Santos Apóstoles Bartolomé y Felipe y la Santa Virgen Mariana confirmaron su predicación con muchos milagros.

En Hierópolis vivía un hombre llamado Stachys, que había estado ciego durante cuarenta años. Cuando le fue devuelta la salud, creyó en Cristo y recibió el Santo Bautismo. La buena nueva se extendió por toda la ciudad, y una multitud del pueblo se agolpó en la casa donde se alojaban los Apóstoles. Los enfermos y los acosados ​​por demonios fueron liberados de sus enfermedades y fueron bautizados. El prefecto de la ciudad ordenó arrestar a los predicadores, encarcelarlos y quemar la casa de Stachys. En el juicio, los sacerdotes paganos se quejaron de que los extraños estaban alejando a la gente del culto a los dioses ancestrales.

Pensando que tal vez algún tipo de poder mágico subyacía en las vestimentas de los Santos Apóstoles, el prefecto dio orden de desnudarlos. Ante sus ojos, Santa Mariana se convirtió como una antorcha de fuego y nadie se atrevió a tocarla. Condenaron a los Santos a muerte. El Apóstol Felipe fue crucificado cabeza abajo. De pronto hubo un terremoto, y una fisura en la tierra se tragó al prefecto de la ciudad, junto con los sacerdotes paganos y gran parte del pueblo. Otros, atemorizados, se apresuraron a bajar a los Apóstoles de las cruces. Como el Apóstol Bartolomé no estaba suspendido muy alto, pronto lograron derribarlo. El Santo Apóstol Felipe, sin embargo, había expirado. Después de nombrar a Stachys obispo de Hierópolis, el Apóstol Bartolomé y Santa Mariana abandonaron la ciudad y siguieron adelante.

Predicando la Palabra de Dios, Mariana llegó a Licaonia, donde durmió en el Señor (17 de febrero). El Santo Apóstol Bartolomé viajó a la India, donde tradujo el Evangelio según Mateo a la lengua vernácula y convirtió a muchos paganos a Cristo. Asimismo, visitó la Gran Armenia (el país entre el río Kura y los tramos superiores de los ríos Tigris y Éufrates), donde obró numerosos milagros y curó a la hija del rey Polimio de los demonios que la afligían. En agradecimiento, el rey envió obsequios al Apóstol, quien se rehusó a aceptarlos, diciendo que sólo buscaba la salvación de las almas de la humanidad.

Luego Polimio, junto con su esposa, su hija y muchos de sus allegados, aceptaron el bautismo. Y gente de más de diez ciudades de la Gran Armenia siguió su ejemplo. Pero a través de las intrigas de los sacerdotes paganos, el Apóstol Bartolomé fue apresado por el hermano del rey, Astiago, en la ciudad de Alban (ahora la ciudad de Bakú), y crucificado cabeza abajo. Pero ni siquiera tendido sobre la cruz dejó de anunciar la buena nueva de Cristo Salvador. Finalmente, por orden de Astiago, desollaron la piel del Apóstol Bartolomé y cortaron su cabeza. Los creyentes colocaron sus reliquias en un ataúd de plomo y lo enterraron.

Aproximadamente en el año 508 las santas reliquias del Apóstol Bartolomé fueron trasladadas a Mesopotamia, a la ciudad de Dara. Cuando los persas tomaron la ciudad en 574, los cristianos se llevaron las reliquias del Apóstol Bartolomé cuando huyeron a las orillas del Mar Negro. Pero como el enemigo los alcanzó allí, se vieron obligados a dejar el ataúd y los paganos lo arrojaron al mar. Por el poder de Dios el ataúd llegó milagrosamente a la isla de Lipari. En el siglo IX, tras la toma de la isla por los árabes, las santas reliquias fueron trasladadas a la ciudad napolitana de Beneventum en Italia, y en el siglo X parte de las reliquias fueron trasladadas a Roma.

El Santo Apóstol Bartolomé es mencionado en la Vida de San José Himnógrafo (4 de abril). Habiendo recibido de cierto hombre parte de las reliquias del Apóstol Bartolomé, san José las llevó a su propio monasterio cerca de Constantinopla, y construyó una iglesia en nombre del Apóstol Bartolomé, colocando en ella una parte de las reliquias. San José deseaba ardientemente componer himnos de alabanza en honor del Santo, y suplicaba fervientemente a Dios que lo concediera la capacidad para hacerlo.

El día de la Fiesta en memoria del Apóstol Bartolomé, san José lo vio en el altar. Hizo una seña a José, tomó el Santo Evangelio de la mesa del altar y lo apretó contra su pecho con las palabras: “Que el Señor te bendiga y que tu cántico deleite al mundo entero”. Y desde entonces San José comenzó a escribir himnos y cánones para adornar no sólo la Fiesta del Santo Apóstol Bartolomé, sino también para las Fiestas de muchos otros Santos, componiendo en total unos 300 cánones. Los Santos Juan Crisóstomo, Cirilo de Alejandría, Epifanio de Chipre y algunos otros maestros de la Iglesia consideran que el Apóstol Bartolomé es la misma persona que Natanael (Jn 1:45-51, 21:2).



REFERENCIAS

Orthodox Church in America. (2024). Apostle Bartholomew of the Twelve. New York, Estados Unidos: OCA.

0 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page