conmemorado el 17 de febrero.
El Santo Gran Mártir Theodoro el Tíro (del latín, “el recluta”) fue soldado en la ciudad de Amaseia en el Ponto (Asia Menor) en la costa del Mar Evxino (Mar Negro), bajo el mando del Praepositus (comandante de regimiento) Brinco. San Theodoro recibió la orden de ofrecer sacrificios a los ídolos, mas proclamó en alta voz su fe en Cristo Salvador. Brinco le dio unos días para pensarlo, tiempo durante el cual el Santo oró.
Theodoro fue acusado de incendiar un templo pagano y destruir el ídolo de Rea, por lo que fue aprisionado a morir de hambre. El Señor Jesús Cristo se apareció ante él, consolándolo y alentándolo. Cuando fue llevado ante el gobernador Publio, Theodoro confesó audazmente su fe, por lo que fue una vez más sometido al tormento y condenado a ser quemado vivo. El Santo Gran Mártir Theodoro montó una enorme pira y, después de hacer la Señal de la Cruz, se encendió la leña, pero el Espíritu Santo enfrió las llamas. San Theodoro, puesto en pie sobre las llamas, alabó y glorificó a Dios. Entonces entregó su santa alma en las manos de Dios, y los presentes vieron su alma ascender al Cielo, según el autor de su Vida, que también fue testigo presencial.
Ésto ocurrió alrededor del año 306 bajo el emperador romano Galerio (305-311). El cuerpo de san Theodoro, ileso por el fuego, fue enterrado bajo la casa de una viuda en la ciudad de Evkháϊta, no lejos de Amaseia. Posteriormente, sus reliquias fueron trasladadas a Constantinopla, a la iglesia que lleva su nombre. Su cabeza se encuentra en la ciudad de Gaeto, Italia.
Cincuenta años después del martirio de san Theodoro, el emperador Julián el Apóstata (reinó 361-363), planeó cometer un ultraje contra los cristianos durante la primera semana de la Gran Cuaresma. Ordenó al magistrado de la ciudad de Constantinopla que rociara toda la comida de los mercados con la sangre ofrecida a los ídolos. San Theodoro se apareció al arzobispo Eudoxio en un sueño y le dijo que informara a todos los cristianos que nadie debería comprar nada en los mercados, sino comer trigo hervido con miel (kolyva).
En recuerdo de éste acontecimiento, la Iglesia Ortodoxa conmemora al Santo Gran Mártir Theodoro el Recluta, cada año el primer sábado de la Gran Cuaresma. El viernes por la noche, en la Divina Liturgia de los Dones Presantificados, después de la oración en el Ambón, se canta el Canon al Santo Gran Mártir Theodoro, compuesto por san Juan Damasceno. Después de ésto, se bendice la kolyva y se distribuye entre los fieles. La celebración del Santo Gran Mártir Teodoro el primer sábado de la Gran Cuaresma fue establecida por el Patriarca Nektarios de Constantinopla (381-397).
El tropario de san Theodoro es muy similar al tropario del Profeta Daniel y los Tres Santos Jóvenes. El contaquio a san Theodoro, quien sufriera el martirio del fuego, nos recuerda que él vestía con la coraza de fe (cfr. 1 Tes 5:8).
En la iconografía, san Theodoro el Recluta se representa de cuatro maneras diferentes: ya sea solo con atuendo militar, luchando contra una gran serpiente, o junto con san Theodoro el Comandante, de pie o montando a caballo. Siempre viste su uniforme militar.
Rogamos a san Theodoro el Recluta por la recuperación de los artículos robados.
REFERENCIAS
Orthodox Church in America. (2023). Great Martyr Theodore the Tyro (Recruit). New York, Estados Unidos: OCA.
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