conmemoradas el 28 de febrero.
Las Santas Ascetas Marána (Marina) y Cira (Kyra), hermanas de nacimiento, vivieron durante el siglo IV en la ciudad de Berea (o Veria) en Siria. Sus padres eran célebres y acomodados, con todo, las hermanas abandonaron su hogar y partieron de la ciudad cuando alcanzaron la madurez.
Después de despejar una modesta parcela de tierra, las Santas Vírgenes sellaron la entrada a su refugio con rocas y arcilla, dejando sólo un estrecho espacio por el cual las hacían llegar los alimentos. Su pequeña morada no estaba techada, por lo que estaban expuestas a los elementos.
Portaban pesadas cadenas de hierro alrededor de sus cuerpos y soportaban pacientemente el hambre. Durante un período de tres años, comieron sólo una vez cada cuarenta días. Sus antiguos sirvientes acudieron a ellas, deseando unirse a su vida ascética. Las Santas los pusieron en una choza independiente a un lado de su propio recinto y hablarían con ellos a través de una ventana, exhortándolos a obras de oración y ayuno.
La vida de las Santos Ascetas Marána y Cira fue descrita por el obispo Theodoreto de Ciro en su obra Historia Religiosa. Por deferencia a su dignidad jerárquica, las Santas Vírgenes lo concedieron entrar en su morada. Theodoreto conversó con ellas y las convenció de que se retiraran las pesadas cadenas que portaban debajo de su vestido. Cira, de delicada constitución, siempre estaba encorvada bajo su peso y no era capaz de sentarse erguida. Sin embargo, una vez que el obispo partió, volvieron a usar las cadenas.
Así vivieron en ascetismo durante cuarenta años. Sólo interrumpieron su soledad para peregrinar a Jerusalén para orar ante el Sepulcro del Señor. Durante su viaje (que duró veinte días) no tomaron alimento sino hasta haber orado en los Lugares Santos. En el camino de retorno también permanecieron sin alimento. Actuaron de igual modo en otra ocasión, cuando viajaron a la tumba de la Santa Protomártir e Igual de los Apóstoles Thekla (24 de septiembre) en Seleucia, Isauria.
Las Santas Marána y Cira durmieron en el Señor aproximadamente en el año 450. Su vida ascética igualaba a la de los grandes hombres ascetas del desierto, y recibieron la misma corona de victoria de Cristo Salvador.
REFERENCIAS
Orthodox Church in America. (2024). Venerable Marina and Kyra of Syria. New York, Estados Unidos: OCA.
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