conmemorada el 16 de enero.
Aproximadamente en el año 42, por orden de Herodes Agripa, el Apóstol Pedro fue aprehendido por su predicación de Cristo Salvador. “Eran entonces los días de los ázimos” (Hch 12:3). En prisión se lo sujetó con dos cadenas de hierro. “Así que, Pedro era guardado en la cárcel; y la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él” (Hch 12:5). En la noche que precediera a su juicio, un ángel del Señor le quitó estas cadenas al apóstol Pedro y lo sacó de la prisión (Hch 12:1-11).
Los cristianos que se enteraron del milagro tomaron las cadenas y las preservaron como preciosos recuerdos. Durante tres siglos se mantuvieron las cadenas en Jerusalén, y aquellos que padecían enfermedades y se acercaban a ellas con fe recibían curación. El patriarca Juvenal (2 de julio) entregó las cadenas a Evdokia, esposa del emperador Teodosio el Joven, y ella a su vez las trasladó de Jerusalén a Constantinopla alrededor del año 437 (o 439).
Evdokia envió una cadena a Roma a su hija Eudoxia (la esposa de Valentiniano), quien construyó una iglesia en la colina El Esquilino dedicada al Santo Apóstol Pedro y dispuso la cadena en ella. En Roma había otras cadenas con las que fue encadenado el Apóstol Pedro antes de su martirio bajo el emperador Nerón. Éstas también fueron dispuestas en la iglesia.
El día 16 del mes de enero las cadenas del Santo y Glorioso Apóstol Pedro se presentan para veneración pública.
REFERENCIAS
Orthodox Church in America. (2024). Veneration of the Precious Chains of the Holy and All-Glorious Apostle Peter. New York, Estados Unidos: OCA.
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