conmemorado el 14 de abril.
En el cuarto domingo de la Gran Cuaresma se conmemora al Venerable Juan (Clímaco) el Sinaíta, autor de la Santa Escala del Divino Ascenso. En dicha obra, el Higúmeno del Monasterio de Santa Catalina en el Monte Sinaí da testimonio del gran esfuerzo que se requiere para entrar en el Reino de Dios (Mt 10:12). La contienda espiritual de la vida cristiana es ardua “porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes” (Ef 6:12). San Juan alienta a los fieles en su empeño porque, como ha dicho el Señor, sólo “el que persevere hasta el fin, éste será salvo” (Mt 24:13).
San Juan nació hacia el año 525, hijo de padres devotos y acaudalados. Recibió una muy buena educación, pero a la edad de dieciséis años abandonó el mundo y partió al Monte Sinaí, sometiéndose a la guía espiritual del Anciano Martyrios. Pasado un tiempo, el Anciano durmió en el Señor. Posteriormente san Juan entró en la arena del Hesicasmo, visitando las comunidades monásticas de Skḗtē y Tabénnisē en Egipto. Durante cuarenta años, vivió en una celda en Thora, en el desierto del Sinaí, la cual se hallaba a dos horas a pie del Monasterio de Santa Catalina.
Inflamado con un anhelo indecible de Dios, se alimentó de todo lo que estaba permitido por la Regla monástica, pero solo en porciones muy pequeñas, y no hasta la saciedad. Al hacerlo, venció el vicio del orgullo; y consumiendo sólo poco alimento, humilló el estómago, que siempre quiere más. Elevó su cuerpo de la muerte y la parálisis por el recuerdo de la muerte, y venció la tiranía de la ira con la espada de la obediencia.
¿Quién puede describir la fuente de sus lágrimas, que hoy se advierte en raros individuos? Dormía solo lo necesario a fin de evitar toda distracción. Antes de acostarse oraba largamente y también escribía libros. Así fue como dominó el desaliento. Su vida la pasó en oración incesante y en un amor incomparable por Dios.
Después de escribir La Santa Escala por petición del Higúmeno Juan del Monasterio de Raithu, y de llevar una vida agradable a Dios, san Juan durmió en el Señor cuando tenía cerca de setenta y cinco años (ca. 603). Se lo conmemora igualmente el día 30 de marzo.
REFERENCIAS
Orthodox Church in America. (2023). 4th Sunday of Great Lent: St John Climacus (of the Ladder). New York, Estados Unidos: OCA.
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