conmemorado el miércoles 1° de mayo de 2024.
El Sacramento de la Santa Unción es un sacramento de fe (St 5:14-15). Está destinado a cualquier persona enferma y siempre se celebra con la esperanza de que traiga curación. Si bien éste es ciertamente el efecto deseado, no es la condición indispensable de tal Sacramento. El propósito esencial de tal Sacramento es conceder que la persona participe de la victoria de Cristo y elevarla a la esfera del Reino de Dios. El dicho comunica poder espiritual para que las pruebas de la enfermedad se sobrelleven con valentía, esperanza y fortaleza.
La celebración solemne de la Santa Unción el Gran Miércoles Santo sirve para recordarnos el poder de Cristo para perdonar y liberar la conciencia del pecado personal y colectivo. Así, ayuda a poner de realce la expectativa gloriosa de la Pascua: la Resurrección, redención y santificación de toda vida. Además, nos ayuda percatarnos de cuán frágil realmente es la vida humana y cuán dependientes somos de Dios; acaso nuestra vida haya de tener un verdadero sentido.
MIÉRCOLES SANTO: EL ORDEN DEL SERVICIO
Oraciones introductorias y Salmos 143 y 51. En éstos Salmos confesamos nuestra pecaminosidad ante Dios y le pedimos que nos limpie y haga un “espíritu nuevo y recto dentro de nosotros” (cfr. Sal 51:10).
Canon. En ésta serie de versos que se leen o cantan, pedimos a Dios que tenga misericordia de nosotros y limpie nuestras almas, que aleje todos los poderes malignos, que conceda la salvación a los que están enfermos o que sufren, y que nos conceda la curación de nuestros almas y cuerpos. Al final de varios conjuntos de versículos, le pedimos a Dios que renueve nuestras vidas para que podamos agradecerle, bendecirlo, y glorificarlo para siempre.
Oraciones cortas o Troparia a los Santos. Oramos a los Santos especialmente a aquellos que han socorrido a los enfermos y a los sufrientes, y a los que han sido martirizados por la gloria de Dios, así como a la Santísima Madre de Dios para que interceda por nosotros para la salvación de nuestras almas. Pongamos por caso:
El Gran Mártir Demetrio de Tesalónica, cuyos huesos aún emanan mirra, es célebre en todo Oriente como sanador de los enfermos. Demetrio, que estaba en prisión en ese momento, predijo que, a través de sus oraciones, Néstor conquistaría al gladiador favorito del emperador, Lyaeus. El Emperador estaba tan enojado porque Néstor ganó que hizo matar a Demetrio y Néstor.
San Pantaleón de Nicomedia fue un médico cristiano martirizado por su fe en el año 304 d.C. Realizó muchas curaciones milagrosas en el nombre de Jesucristo.
Los “Anárgiros”, título dado a los médicos que rehusaron todo pago de sus servicios; se refiere a dos de los obradores de milagros más célebres de la Iglesia primitiva: Cosme y Damián.
4. Lecciones y Oraciones de la Epístola y el Evangelio. Hay siete conjuntos de lecturas y oraciones de la Epístola y el Evangelio:
Santiago 5:10-17, Lucas 10:25-37
Romanos 15:1-7, Lucas 19:1-10
1 Corintios 12:27-31; 13:1-8, Mateo 10:1,5-8
2 Corintios 6:16-18, 7:1, Mateo 8:14-23
2 Corintios 1:8-11, Mateo 25-1-13
Gálatas 5:22-6:2, Mateo 15:21-28
1 Tesalonicenses 5:14-23, Mateo 9:9-13
Cada una de las siete oraciones pide la remisión de nuestros pecados, la sanación de nuestras almas y cuerpos y la vida eterna.
Después de la séptima Epístola, Evangelio y Oración, el sacerdote lee una oración de perdón mientras el libro del Evangelio, que contiene los relatos de los muchos milagros de Jesús, se coloca con las páginas impresas hacia abajo sobre las cabezas de los enfermos. Al hacerlo, se espera que también reciban sanidad corporal y espiritual y que la fe en la Palabra escrita de nuestro Señor se fortalezca en la mente de los presentes. Así como Cristo puso su mano sobre los enfermos cuando realizó sus muchos milagros, el sacerdote pone su mano sobre el Evangelio que reposa sobre la cabeza de los fieles.
5. La Unción. Al final del servicio, todos los cristianos ortodoxos en buena posición canónica con la Iglesia, son ungidos con el Sacramento de la Santa Unción mientras el sacerdote dice la siguiente oración: “Santo Padre, Médico de nuestras almas y cuerpos, ten piedad, perdona y salva a tu siervo…”
REFERENCIAS
Santa Barbara Greek Orthodox Church. (2023). Holy Wednesday. Connecticut, Estados Unidos: Santa Barbara Greek Orthodox Church.
Comments