conmemorado el 14 de mayo.
De dónde procedía san Terapon (gr. Θεράπων), se desconoce. Según algunos, provino del este, de “Eóas” como señala san Andrés de Creta, y según los chipriotas era “del país de los Alamanes” (poblado germánico que se estableciera en los cursos superior, medio e inferior del Elba y a lo largo del Meno). La fecha exacta de su nacimiento es enteramente desconocida. La información proporcionada por distintos Sinaxarios, como por ejemplo sus obras contra las distintas herejías monofisitas e iconoclastas, nos permiten concluir que san Terapon vivió en el siglo VII o principios del VIII, pero no después del año 740, tiempo de la dormición de san Andrés de Creta. Probablemente al final de su vida, san Andrés expresó grandes palabras de alabanza mediante un encomio en honor a san Terapon.
La hagiografía de la Iglesia de Cristo dice que pertenecía a la clase de los monjes, aquellos que verdaderamente renunciaban a su propia voluntad y portaban con regocijo la Cruz del Señor. La tradición dice que Terapon vivió un tiempo en Jerusalén y luego se convirtió en obispo de Kition en Chipre. Allí, continuó obrando milagros y pastoreando al pueblo hasta el tiempo de su martirio, cuando fue asesinado por piratas árabes mientras realizaba la Divina Liturgia, sobre la Santa Mesa.
El Santo se apareció al sacristán de la iglesia y le dijo que los infieles sarracenos atacarían Chipre y le ordenó que llevara sus reliquias a Constantinopla. Sus veneradas reliquias fueron transferidas a Constantinopla, en el año 806. Cuando el barco navegó a Constantinopla, una mirra fragante comenzó a fluir de la reliquia, y los viajeros en el barco fueron salvados milagrosamente durante una tormenta por sus oraciones a san Terapon. Al llegar a Constantinopla, inicialmente fueron llevadas al Templo de la Madre de Dios en Blachernae. Luego a una iglesia que lleva su nombre. Hoy en día, dentro de los muros de Constantinopla, hay una pequeña capilla-santuario, donde brota mirra y agua bendecida (“Ayíasma”) y se obran milagros, a todos los que le invocan con fe sincera.
Es conocido como el “Ayíasma” de san Terapon en el Muro de Seraglio cerca de Pasha Kapusi, sitio donde dos veces por semana, los días lunes y viernes, los fieles se reúnen para orar (incluidos no pocos turcos), encender velas y buscar curaciones.
Uno de los muchos milagros de san Terapon es el siguiente: cuando estaba en Jerusalén, se encontró con una mujer hebrea llorando desconsoladamente, diciendo que iba a enterrar a su hijo muerto. Tan pronto como la vio, el Santo sintió compasión de ella y orando al Señor resucitó a su hijo. Después de eso, madre e hijo, tras agradecer a Dios y a san Terapon, fueron bautizados cristianos.
Las Santas Reliquias de San Terapon se guardan en Monasterio de Zografou en el Monte Athos, en la Iglesia San Terapon de Atenas y la Iglesia con su nombre en Mitilene.
El oficio del Santo fue escrito por san Nicodemo el Athonita y fue actualizado en el año 1785 por el Archidiácono Agapio de Paros.
Conviene señalar que existen otros cuatro santos con el mismo nombre: Hieromártir San Terapon de la Iglesia de Sardes en asia Menor; el Venerable Terapon de Monzeskiy en Rusia; san Terapon, asceta de Lithrodontas; y san Terapon de Volokolamsk de Moscú, Abad del Monasterio que posteriormente llevaría su nombre, en el Lago Béloye de Rusia.
REFERENCIAS
La Ortodoxia es la Verdad. (2024). San Terapon, Obispo de Chipre. Atenas, Grecia: https://laortodoxiaeslaverdad.blogspot.com
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